Durante un fin de semana nos escapamos al Valle de Boí para descubrirlo en familia y así proponeros los mejores planes para disfrutar con los pequeños de la casa.

Cómo llegar al Valle de Boí

Aunque se puede llegar en transporte público hasta El Pont de Suert, para moveros por el Valle de Boí necesitaréis un coche, así que lo mejor es que lleguéis a la zona con vehículo particular.

Os recomendamos que toméis la AP2 hasta Lleida y desde allí la N-230 hacia Benavarri – El Pont de Suert. Una vez allí deberéis desviaros hacia el Valle de Boí por la carretera L-500.

Donde alojarse en el Valle de Boí con niños

En el Valle de Boí hay una variada oferta de apartamentos y alojamientos, muchos de ellos de estilo rural. Nuestra recomendación es que elijáis un establecimiento que esté en algunos de los municipios más grandes.

Qué hacer en el Valle de Boí con niños

Una caminata por el Salencar de Barruera

El entorno de Barruera es precioso y os recomendamos hacer una ruta circular de baja dificultad, ideal para niños, ya que es bastante corta y sin apenas desnivel. 

La ruta del Salencar de Barruera, también conocido como pantano de Cardet, comienza cerca de la iglesia románica de Sant Feliu, cruzando un puente colgante de madera que atraviesa la Noguera de Tor. De hecho, casi todo el recorrido va paralelo a este río que desemboca en el pequeño pantano.

Por otra parte, a lo largo de todo el camino hay cartelería con información sobre las diferentes especies animales y vegetales que pueblan la zona y donde también se explica la variabilidad de este hábitat en función de la época del año.

Convertirse en granjeros en La Rutlla

También en Barruera encontramos La Rutlla, un espacio familiar donde hay una granja y también una braseria. Diariamente ofrecen visitas a la pequeña granja, donde se invita a los pequeños de la casa a alimentar y acariciar a los animales. Hay caballos, ovejas, cabras, gallinas… y también se muestra el espacio en el que la familia dispone de un huerto para consumo propio.

Más allá de la granja, el restaurante de La Rutlla, especializado en carne a la brasa, también dispone de una zona de juegos, por lo que es una muy buena opción para disfrutar con la familia.

Excursión fácil por el Parque Nacional de Aigüestortes

En el Valle de Boí hay una de las entradas del Parque Nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici, la que conduce a una zona muy llana, ideal para disfrutar de excursiones y paseos en familia.

Buscando tesoros por las iglesias románicas del Valle de Boí

Las iglesias románicas del Valle de Boí, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde el año 2000, son uno de los grandes reclamos turísticos de la comarca de la Alta Ribagorça.

Probar las aguas termales de Caldes de Boí

En Caldes de Boí hay un centro termal rodeado por unos grandes jardines de 24 hectáreas por donde vale la pena pasear tranquilamente un rato.

Las aguas de Caldes de Boí son mineromedicinales de diferentes composiciones y temperaturas, que van de 4ºC a 56ºC. A lo largo de todo el recorrido que se puede hacer por los jardines se van encontrando diferentes fuentes donde podréis degustar las diferentes aguas, muchas de ellas con propiedades curativas.

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